Ser libre es gastar la mayor cantidad de tiempo de nuestra vida en aquello que nos gusta hacer.
Pepe Mujica
Cuando creencias limitantes nos gobiernan sentimos que tenemos que aprender a vivir del aire con banderas de niebla -tal cual lo hacen los habitantes del desierto de Atacama, en Chile-, lo que nos enfoca en sobrevivir; no en vivir a plenitud.
La percepción de plenitud es ser conscientes de lo ricos que somos aun cuando las arcas monetarias no presenten mayor contenido.
Por otro lado este contraste me ha permitido valorar mi fortuna y aprovecharla.
Mi cuerpo, mi salud, mi mente, lo aprendido, -lo desaprendido especialmente-, lo viajado, lo disfrutado; todo me habla de abundancia y no de carencia o de limitación. Me veo como el hombre de muchos recursos que en verdad soy y eso me impulsa a lograr todo lo que deseo en el mundo.
He recompuesto mi batería de cañones a bordo y confío plenamente en ellos, sé que están en perfectas condiciones para la batalla.
A babor 21 morteros de largo alcance y 7 bombardas, lo mismo traigo por estribor. En la proa 7 cañones largos y dos bombardas, lo que repito en popa. Después de navegar un buen rato a palo seco (sin velas por falta de viento) he decidido volver a hacerme a la mar y aprovechar cualquier brisa por leve que sea. Usaré los cañones para remar -también- si fuese necesario...
Dentro de esta recolocación de la artillería personal a bordo, veo las cosas hermosas que me nutren y que mucho me emocionan; motivándome a lograr lo que me propongo. Entre esto último están las maravillosas aficiones que he tenido. ¿Qué decir de mis amados juguetes? Recuerdo por ejemplo mis bellos trenes eléctricos. ¡Qué maravilla!
Como motivación para esta semana te invito a nutrirte de estas cosas que han llenado tu alma en diversas épocas de vida. ¡Disfrútalas! Saca fuerza de tu interior y bebe el agua de tu propia fuente.
El mayor aprendizaje de la edad reside en aceptar la vida exactamente como nos llega.
Todos somos uno y vamos por el mismo camino al mismo lugar.
Dale amor al otro.
Autor: Fernando Jorge García Asomoza.
Tzakapu, Michoacán.